sábado, 31 de mayo de 2008

de vuelta "al lugar"




Llegué dando bote, igual que una pelota de futbol, cuando la pateas desde mitad de cancha para hacer un globito con toda potencia, pero luego, cuando das la media vuelta y apoyas los dos pies en el pasto, volteas para mirar el golazo y vez como la pelota botea la necesario como para caer a los pies del golero, la agarra, sin problemas.



Así me patearon, desde un rincón de Santiago, con toda potencia, rebotando por Maipú, Pudahuel, Estación Central, La Reina, Santiago centro, Vitacura, Talagante, Renca. Impulsaba mi cabeza hacia abajo, cada vez que esperaba el bote en el piso, quería llegar lejísimo, botear para siempre, pero caí a los pies de un lugar que me desconcertó.
Me pregunte muchas veces que si acaso el puntapié no había sido lo suficientemente fuerte como para llegar tan lejos. Los relatores lo anunciaban: “Uff, pintaba para golazo, pero le falto comba ¿o no sapito?”, decía Carcuro, con un tono desolador. “siempre falta la chaucha para el peso don Pedro, esta no fue la excepción, Chile juega bien, pero no marca”, le señalaba el sapito Libingtone.


Abrí la ventana de la micro, para que me llegara el aire, queria despabilar, estaba ansioso, nervioso y con mucha adrenalina, le gritaba al chofer para que apurara la maquina, no quería llegar a trazado. La gente que en un comienzo me miraba asustada, ahora comenzaba a lanzarme gritos acusadores, para que cerrara la boca, yo seguía cerrando los ojos y aguantándome las ganas de llegar al lugar. En eso estaba. Cuando la micro frena en seco, abrí los ojos encolerizado, para ver que mierda pasaba. Me percaté del taco que acomodaba la micro en la que iba, como un gigante rompecabezas. Miraba a la demás gente, muchos de ellos de pie, algunos colgando con cara de desahucio, de cansancio, todos tenían algo que hacer, todos tenían un destino, creo que era eso lo que los calmaba, lo que los mantenía vivos, lo que no les permitía desplomarse y caer en un profundo sueño. Yo, a diferencia de los demás tripulantes no encontraba ese lugar, no tenía destino, ni siquiera sabía porque me había subido a esa micro.
Sin pensarlo dos veces, me paré de golpe, para tocar el timbre y apenas abrió la puerta, me lancé hacia afuera, como los heladeros, pero sin la caja con helados.



Ya abajo, en medio de un paradero repleto de gente, que daba la impresión de ser una fila para un concierto de algún cantante famoso el cual había agotado sus entradas, me lancé a la calle, me puse la capucha del poleron, subí la música de mi mp4 hasta el tope, y comencé a caminar, caminar y caminar, sin pensar en nada, ya estaba atrasado para llegar al lugar, “que tan atrasado llegara daba lo mismo”, me dije. Mejor aún, el lugar ya comenzaba a darme lo mismo, me había dado el día libre para caminar, caminar y caminar. Era lo que acababa de comprender.
Fue tanta mi libertad, que casi no me di cuenta, como ni porque me encontraba en la puerta de mi casa, lugar del que había salido horas antes, enojado, aburrido, apurado, estresado, para “aquel lugar”.


Ahora miraba esa misma casa, pero me parecía más bella, mas grande, mas colorida, mas tranquila, mas acogedora. El viaje había sido instantáneo, como aquellas caminatas hacia un lugar que frecuentas durante mucho tiempo, tanto así, que los pies hacen sola su pega, tu cabeza puede estar en otro lado, pero llegas siempre, nunca te equivocas. Abrí la reja, y toque la puerta esperando que alguien me abriera.



La puerta se abre luego de un rato. Cuando levanto mi cabeza noté que era mi madre, que me miraba extrañada y sin preguntarme nada me dijo:
-que frío hace, pasa, está listo el almuerzo.

martes, 13 de mayo de 2008

No se come cuando se habla

¿Qué cuánto cuestan?
Como quina, o quina cincuenta, algo por ahí.
¿Qué que traen?
De todo, puta; palta, tomate y mayo.
¿Cómo que… que más?
Eso pues hombre, si por eso se llama italiano.
De otra forma se llamaría, no sé, checo, alemán, nicaragüense,
¿Te imaginai gueon, que traería un completo estonio?…
Traería algo así como crema de arándano, merengue, y salsa de uva.
Seria brígido.
Mejor aún, un completo de Chipre, tendría puro merengue.
No se po gueon, a mi me gusta más el ass.
Pero eso sí que es exótico, llamar ass a algo que se coma.
No se…comer poto no será de lo más saludable. No creo que algún nutricionista recomiende comer poto.
¿Quiere italiano o prefiere servirse un poto?
No sé, seria, gracioso igual, distinto, eso sí.
En la esquina po gueon, como a dos cuadras de acá.
Osea, nunca, pero el Mauricio va siempre con los cabros, dicen que son gigantes.
Siii po gueon. Pa que te vai a cagar la guata de apoco, cágatela de una, y harto.
Si es mejor, tener buena digestión, para no engordar po gueon.
El ítalo va como siete veces al baño en el día gueon, EN-EL-DI-A-GUE-ON.
Puta no seee po gueon, tiene buena digestión.
Las minas van como una vez cada dos días, a veces tres.
Si son cuáticas.
La otra vez le pregunte a la Marce.
No sé cómo salió el tema gueon, como que de repente la vi pasar al baño, y cuando venía de vuelta le dije:
-¿Y?... ¿Cómo te fue?
-Bien, si fui a lavarme las manos no más.- me dijo.
Yo le dije ¿y no vay a hacer otras cosas?
Ahí me dijo que no hacía en baños ajenos, que prefería aguantarse hasta la casa, pero cuando llegaba, se le pasaban las ganas, como que se le olvidaba, ¿cachay?
Como cuando tenis algo pendiente, y sabis que no podis obviarlo, pero se te olvida igual…
Nah po, ahí se fue, y yo seguí comiéndome las tostadas del casino.
Nooo ¿Por qué asqueroso gueon?
Aparte que no me la quiero imaginar en eso, porque la encuentro rica.
No quiero imaginármela, porque esa es una táctica pa cuando queris que te deje de gustar una mina.
Tengo un amigo que decía que las minas no hacían caca gueon, hacían flores.
Si, era un poeta el hombre, volao como el solo eso sí, uff, te contara…
Pero solo las ricas po gueon, las otras hacen caca. Según su teoría.
¿Te atrevis a preguntarle a alguna mina rica si hace flores?
¿Y como yo le pregunte a la marce?
¿Cómo que es ordinaria?
Gueon vive en Las Condes, tiene el pedazo de departamento, auto, dos notebook, de todo gueon.
No si se que no tiene nada que ver, pero igual po gueon.
Es una tendencia.
Cacha allá va la Leslie. Es mala gueon, pero como que tiene algo.
No si dije que era mala, si te dije antes.
Primero que todo…
Partí diciendo que era mala, pero que tenía algo. Eso dije.
Aaa no se, como que un aire, no sé, se sabe rica la gueona, y las que se saben ricas, tienen a la vez un poder de convencimiento, que persuade a los demás. Como que la mirai y decís, puta cuando nació, los papas vieron que era malita, que no le iría bien con los hombres, y por eso la criaron con todo el amor del mundo.
Fíjate.
Estéticamente es mala.
Pero aun así la hariai.
Aaa, pero gueon si dijiste que no tenía nada gueon.
Ahora la haríai, eso quiere decir que no la encontrai mala.
No po gueon, estay siendo inconsecuente, es como si dijeray que el matador está guatón y que no corre ni en bajá, y después celebrarai los goles que haga.
Aaa gueon, no puedo discutir con un gueon que no tiene una postura clara frente a la vida, porque no sabís que discutirle, y es fome discutirle a alguien que no quiere discutir, al no tener una postura frente a la vida, que sea clara… (¿?)
Oye ya vamos a bajonear, que la guata me suena gueon, yo como que me enfermo cuando no como y hay gente que se muere de hambre.
Como va a ser sugestión, si es algo que no puedo controlar, como que pasa no más. ¿Cachay?-
Ya, yo voy, el que me sigue, bien, el que no, que se cague de hambre.


No. Fui al baño gueon.
Nunca dije que me iba. Dije que yo iba, que el que quería que me siguiera, pero nunca dije lugar, ni hora, ni nada.
.gueon, ¿hay algún notario que certifique, que dije eso?
Ya po gueon.
Ya ahora sí. Cabros ¿vamos a comernos un completo?
Como… ¿estamos en la hora ya?
Pero si salimos recién.
Ni me he sentado gueon.
Ya gueon a las 3:00. A las 2:50. Salimos antes, pa relajarnos un rato.
Ahí sí que si gueon, si no voy solo no mas, que tanta guea.
Puta ahora me voy a enfermar por su culpa gueon.
No es sugestión, ya te dije gueon.
Toma, llama a mi mamá, pregúntale. Yo no voy a decir nada.
Como que pauteado gueon.
Tu creis que yo le digo todos los días:
“mamá, si te llama alguno de los cabros, antes que diga cualquier cosa, dile que tengo que comer, porque si no me enfermo”…
Ya, entra tu primero.
Puta, porque yo siempre entro primero po gueon, yo siempre doy la cara. O que entre el Jaime.
Ya filo yo entro…tanto tramite, vive la vida loco, déjate llevar.


Te dije que este viejo era cuático gueon. Que se trastornaba con la puntualidad.
Como que se excita cuando llega y están todos sentados.
Como que si uno llega tarde, no puede llegar al orgasmo, como que lo interrumpen.
Ya filo, vamos a comer un completo, que me cago de hambre.
¿Qué cuánto cuestan?

sábado, 10 de mayo de 2008

aconséjame buen aconsejador


Creo que todo lo que se aprende y te digo: "que no panda el cúnico", alguna vez se vuelve a desaprender. Todo lo que se arma, se tiene que desarmar, todo lo que sube tiene que bajar.
Por todos los consejo que recibo escuchándolos, pero no comprendiéndolos, y pido perdón por mi insensibilidad, por el esfuerzo concebido al emitir un comentario, dícese sabio de un amigo para apelar a mis conductas, pero es que considero un consejo, completamente inservible, cuando nos son las experiencias el fruto de la corrección.

He escuchado mas de un par de veces, lo siguiente: “que gueon, si el sicólogo no hace nada, el gueon solo se remite a escuchar, y comentar con un vocablo casi intraducible, cada cosa que no entiendo, al final, es gastadero de plata”.
Si todos comprendiéramos lo mal sicólogos que somos, sería más fácil mandarse condoros (y mas para uno que gusta tanto de mandárselos). Y si supiéramos lo difícil que es escuchar a un “confundido”, o “congestionado”, porque para uno todo tiene una solución fácil, a diferencia del aludido.
Tengo un amigo, (y no diré tu nombre Ricardo Moreno fuera de este paréntesis invisible que solo puedes ver tu, así que tranquilo) que se encarga de enrostrarme cada cosa mala que hago, cada falta que cometo, cada aberración que sale de mis actos, y lo considero una lata, pero es risible a la vez, que te reten a estas alturas, que te enrostren lo malo que eres, es perfectamente chistoso.

Yo, en lo personal, soy un pésimo sicólogo. Cuantas personas me dan las gracias por aconsejarlos, que casi estarían dispuestos a pagarme por aclararlos, y no saben lo fácil que es mirar la paja en el ojo ajeno. Compadre, el beneficiado no eres tú, porque por más hermoso que resulte mi manifiesto, no lo utilizaras porque somos todos unos animales, y yo soy el más beneficiado por qué ejercito mi mente al trabajar tus depresiones.
Que tétrico suena pero es verdad, los consejeros, ganan la diversión del ejercicio de justiciero moral, que sirve al menos para calmar nuestra amoralidad, y el aconsejado sigue igual, se agarra a la mina del amigo igual, le pega al gueon igual, he insulta a su suegro igual. Para que. Digo yo, para que pierden su tiempo los congestionados preguntando qué hacer, si al final ni se inmutan luego en la acción.


- Gueon, que hago, me cago la maraca gueon, y con el conchesumadre que me cago gueon, penca el culiao, ni un brillo. si ahora cualquier gueon entra a la chile po gueon, pa que andamos con gueas. y yo igual tengo pinta, por último po gueon, no sé. En vola es culpa mía, pero esa gueona también, si fue tan re perra gueon, en mi cara osea, no en mi cara, a mis espaldas, que es lo que más me duele, por ultimo avisarme, no sé, por cariño, por último. Igual estoy pa la caga gueon, a qué hora salís el jueves?, aaa tenis solemne, no se po gueon, pa tomarnos un copetito, nooo si no estoy pa na bien gueon, estoy con rabia, eees que esta conchesumadre, y con le gueeeooon, si eso es lo que más rabia me da. No si no es por mi gueon, si por mí, que haga lo que quiera, si es por ella que se caga la vida con un gueon tan penca. No si yo lo mato, le aforro, te digo, si lo pillo en el metro, lo tiro a la línea gueon, la dura. No si no estoy guebiando. No si se gueon, Si es broma, si no soy asesino.
Pero que hariay tu?...
Es que pa ti es fácil decirlo po gueon.
No si tengo plan, tranquilo, espera.
Puta no tengo fuego gueon, quiero puro fumarme un pucho gueon, pa calmarme.
Nooo si se gueon, si estoy tranquilo. Siii si la guea ya fue. Nunca más la llamo gueon. Nooo si se gueon, siempre digno.
¿Tu creis? Ni disculpas me pidió. Si la pillee gueon, el manolo me conto todo gueon. Si no tenia por donde escaparse, haber espera. Pablo, oye gueon, pa donde vay?, puta pa que hagamos algo después de clases po gueon, siii po gueon una chelita, dale, a la vuelta cachamos po gueon, dale. Ya ahora sí, este conchesumadre es muy re simpático, pero es tan sacoguea gueon, es el que te conté la otra vez, al que en la serena le echaron jabón liquido en el trasero cuando se le apago la tele, ¿te acorday que te conté?, ¿que casi se tira por la ventana cuando despertó?, claaaro, pensó que se lo habían….claraaro. No si es buena persona gueon, pero es saco guea ¿cachay?
¿Qué te estaba diciendo?
A si po gueon, no si puta, igual como que me cago de onda de repente.
Es que es cuático po gueon, si le daba todo, TODO po gueon. Nooo si eso no es nada, si pa los 2 años, la invité a pan de azúcar, trabajé todo un mes en la biblioteca como gueon, y puta, todo pagado, no gastó ni uno la gueona. Siii po gueon, y la muy cara de raja me sale con esta gueaaaa. Puta gueon, que queris que te diga, marca po gueon, si no tiene otro nombre. No si se po gueon si esto te lo digo a ti, nunca se lo voy a decir a ella po gueon, aparte que borré su número, ¿ha? si, si obvio que me lo sé de memoria po gueon, pero por último, por una guea simbólica, como que ya no está en mis intereses, ¿cachay?
Noooo, si es que me cago de onda gueon. Haber espera. Oye flaco, ¿tenis fuego?, shh que guea gueon, te pido fugo y me pedís cigarro gueon, ándate a la chucha culiao, que guea?, espera que corte po conchetumadre ,¿ a si?, ya po gueon, porque anday con tus amigos te hacis el choro gueon,¡ conchetumadre!.
Ya ahora si. No si estoy tranquilo gueon, es que me carga la gente barza, y en este país está lleno, oye, ya po gueon, juntémonos el jueves, a verdad que me dijiste gueon. Ya, vale por tus consejos, siii gueon…si soy mi amigo gueon, puta haber espera.
¡Pablo! ¡Pabloooo!, ¡pablo gueooon!
Miiira el cabro culiao se fue, se hizo el gueon, nerd culiao, si no lo pesca nadie gueon,si es un loser de tomo y lomo. Supiera que yo le dije al Bareto que le hechara jabón en el poto gueon,si lo invité por caridad no mas gueon, porque me da pena lo pavo que es gueon. ya filo, ahí hablamos por msn, te cuento bien la guea, que este celular, chupa como orilla de playa…como vo en el tabo po gueon, no si el celular es nuevo si es el plan, tan re malo gueon, dale…ya gueon, no si filo gueon, si me tomo una petaca solo en la plaza del economax, fiilo gueon, no te preocupis de verdad,ya chao, ahí hablamos pa cachar la guea po gueon, ya saludos gueon, si si se gueon, vale compadre, chao chao.-

Si contara las veces que me dijeron, no te fijes en la pinta, o que tan rica es la mina para pololear, o no te compres algo que sabes, no te pondrás, o no hagas algo de lo que después te arrepentirás. Una tras otra, error tras error, decisión tras decisión errada, como caballo de carrera, fuerte y pa adelante no mas, chocando firme, como Adriano, como Eliseo Salazar, eso es.
Mi remordimiento es por mi incapacidad de aprender, y mi facilidad para olvidar las experiencias. De la boca hacia afuera luce todo fantástico, pero para adentro, ni te cuento el desorden, es extremo, pero usual, ¿para qué pintar de blanco lo negro, si igual se traspasa?


Fumar es malo. Mentir es malo, tomar es malo, molestar es malo, burlarse es malo, los cuicos son malos, los flaites son malos, las privadas son malas, las estatales son malas, comer a deshora es malo, no comer es malo… Pero si ya no se sabe que es bueno y malo finalmente, y aunque se supiera, me digo antes de decir; que entretenido es, dios mío, hacer de la maldad un himno.
Lo que es yo, me mando condoros, y ni le pido consejos a nadie. A veces lo hago para que la gente ejercite su creatividad, porque uno da consejos increíbles, he escuchado cada discurso, increíblemente detallado, prolijo, perfecto, bello, pero lamentablemente olvidable. Mas de alguna vez, he quedado más que perplejo, asustado, realmente con mis consejos, creo que dando consejos uno se siente mejor, mejor de adentro, mejor persona, y eso que no se ha hecho nada, solo se ha dicho mucho, bastante. Pero en rigor, nada mucho que digamos, sobre.

Es que señores, creo, hay que ser bondadoso con el consejero, porque tal parece que en cada conversación de este tipo, el que parece desahogarse es el consejero, mucho más que el aconsejado. ¿Consejero, aconsejado, emisor, receptor?, ¿mensaje? ¿Cuál?¿no? ¿Se?

Yo disfruto mil veces más aconsejando, que siendo aconsejado, y creo que todos deben creer lo mismo. Pero me refiero a un mal consejero, no a uno bueno, ese que solo te escucha y no quiere cambiarte, ese finalmente cumple su rol, te comprende, independiente de la decisión que tomes, al menos, no te dice que hacer, que es lo que en el fondo necesita un aconsejado.
El mal consejero es mucho más entretenido, divierte escucharlo. Recomiendo el ejercicio, de inventar, acudir a la mentira (aunque sea malo) y pedirle a cualquiera que te aconseje.
No pagaría por un monologo de humor, pero si por un consejero, que es gracioso sin saberlo.
Porque el consejero, siempre te dice lo que el realmente no hace. Cada cosa que escuches en un consejo, no viene propiamente de la experiencia fundada en el consejero, solo la desembocadura de consejos, consejos y mas consejos, que recibió, de tal, y cual, que escuchó así mismo de otros. Como la leyenda.

Por favor, deténgase en la cara del consejero por un instante señor director, miren que actuación, que maravilla, primer plano a las cejas en forma de cerro, los ojos brillando como bolita de acero, ojo con su cabeza inclinada como de perro tierno, ojo con sus manos entre cruzadas, sus orejas palpitantes. Eso es señor aconsejado, haga algo por el prójimo y pida ser aconsejado. Le estará entregando una terapia sicológica gratuita a quien realmente lo necesita, el nunca bien ponderado, el querido y a la vez odiado, damas y caballero los dejo en presencia de… ¡El consejero!